La comida en el restaurante es realmente deliciosa, especialmente

la tarta de zanahoria y el arroz con leche, que no puedes dejar de probar. Los desayunos son igualmente completos y han sido preparados con mucho cariño. Sin embargo, la piscina podría estar un poco más caliente para un mayor confort.

Super recomendado para unos días

Maravillosa posada, cómoda habitación, amplias instalaciones y una atención de calidad, con un desayuno delicioso y un parking gratuito a la puerta para facilitar el acceso a explorar la zona.

Todo fue perfecto

Las vistas desde el comedor son impresionantes y la piscina cubierta es perfecta para relajarse. Disfruté mucho la comida casera, todo muy rico.

me sentí como en familia, no tengo ninguna pega

piscina cubierta con vistas al monte, habitaciones cómodas y amplias, limpieza impecable

La ubicación resulta algo aislada, lo que puede ser un inconveniente para quienes busquen opciones de entretenimiento cercanas. Además, el restaurante podría ofrecer una oferta gastronómica más variada en comparación con las opciones del pueblo cercano!!!

La piscina ofrece vistas impresionantes, aunque el restaurante necesita más opciones.

La habitación era bastante amplia, tuvimos un balcón que daba a las montañas. Todo muy limpio y con un baño grande. Me gustó mucho el detalle de las instalaciones nuevas, aunque la temperatura del agua de la piscina era un poco fría. En general, una experiencia cómoda para disfrutara con la familia al final de un día de excursión.

la atención del personal fue excepcional y muy amable. las camas necesitan ser renovadas.

Las vistas desde la piscina son espectaculares, perfecto para relajarse. La tarta de queso es increíble, ¡no te la puedes perder! Además, el desayuno ofrece una variedad deliciosa. Me gustó que el personal estuvo siempre dispuesto a ayudar. Un lugar ideal para desconectar. 😍

Gran personal amable y piscina salina, pero el wi-fi en la habitación era lento.

Las habitaciones están decoradas con esmero y la atención de Susana es excepcional, siempre dispuesta a ayudar. Sin embargo, las camas podrían ser más cómodas y el comedor tenía algunas moscas, lo cual fue un poco incómodo. La comida casera es deliciosa y las vistas desde la piscina son espectaculares.

La Posada de Ojebar me sorprendió gratamente. La cena fue excepcional, con una tarta de queso que me dejó sin palabras. La piscina, a pesar de la lluvia, brindó momentos mágicos. Solo noté un pequeño detalle en el agua de la ducha, pero no afectó mi experiencia en absoluto.

Las vistas desde la Posada de Ojebar son realmente impactantes, especialmente con las montañas nevadas al fondo. La comida es de calidad excepcional y muy bien elaborada, con ingredientes de producción local. La atención del personal es muy cálida y te hace sentir como en casa, aunque el acceso en coche es un poco aislado.

Tuvimos una habitación enorme con vistas maravillosas y la comida fue fresquísima, hecha con productos de su propia huerta. La piscina cubierta fue un lujo, aunque llovía a cántaros.

Las camas eran tan incómodas, que casi me despido de mis riñones.

La atención del personal fue increíble. siempre amables y dispuestos a ayudar. Desayunos deliciosos, especialmente las frutas frescas. ¡y la piscina tiene vistas que quitan el aliento!

El wifi en la habitación podría ser más rápido.

Disfrutamos de un fin de semana increíble. La habitación era muy bonita, con vistas a la montaña, y el servicio fue excepcional. El personal estaba siempre atento a nuestras necesidades. Las comidas fueron deliciosas y las opciones del desayuno, variadas y sabrosas. La piscina cubierta es fantástica para relajarse después de un día de excursión.

No hubo aspectos negativos significativos.